Montañas de basura

Sé que no voy a mover ficha yo y que, casi seguro, el resultado será quedar en tablas. Parece una postura poco arriesgada, seguramente lo sea, pero esta situación ambigua me hace sentir nuevas sensaciones que creía olvidadas y me parece bien mantenerme así, aunque sea de ilusión. ¿Y si me tiro al barro ahora y sale mal? No me lo perdonaría nunca.
Mi mente, libre, avanza rápido y deja circular al subconsciente a la velocidad de la luz, materializándose por las noches en forma de sueños aparentemente inconexos, en sueños secuencia, que tanto disfruto.
Al día siguiente me gusta pensar en todo ello y darme pequeñas licencias. Así en plena noche, me despertaré después de haberlo visto en sueños, apretaré fuerte los ojos, para cerrarlos más si cabe y volver a recuperar el sueño en el mismo punto dónde me quedé justo antes de despertarme. Como cuando era pequeña, algunas veces lo conseguía.
Si es así, por la mañana seré un poco más feliz. Entonces cuando lo vea, pensaré por un momento que es de noche, y que no estoy durmiendo.